Sencillamente impresionante

Sencillamente impresionante. El orden del caos. Sencillamente impresionante, esta foto está realizada por el fotógrafo Romain Jacquet-Lagrèze, un diseñador francés que vive en Hong Kong. Esperamos que publicar esta fotografía no vulnere ninguna ley de derechos intelectuales, de la que tanto se habla últimamente.

Otra visión de una ciudad que te dejará boquiabierto

Esta foto es bella en sí misma, pero lo más curioso es que no lo es para todo el mundo, ya que hay muchas personas que verán en ella simplemente un orden caótico de fachadas con terrazas y voladizos en edificios de una ciudad desordenada y que, incluso, para más de uno puede ser sinónimo de pobreza y tercer mundo.

Otra visión de una ciudad que te dejará boquiabierto

Para nosotros esta fotografía, aparte de su valor estético y su belleza como obra de arte, nos transmite una serie de sensaciones que van un poco más allá. Por lo general, en occidente, estamos acostumbrados a un urbanismo ordenado, herencia de un racionalismo que clava su raíces en el Renacimiento pero que se desarrolla en todo su esplendor a partir de la revolución industrial y el crecimiento de las ciudades. Desde el siglo XIX, las ciudades europeas han estado trazadas con tiralíneas en un plano que utilizaban la línea recta como instrumento básico para distribuir las calles y las manzanas,  rompiendo de esta forma con la tradición medieval de ciudades orgánicas. Esta forma de entender la ciudad es la que utilizó el varón Haussmann para la reforma de París en el siglo XIX y la que posteriormente se extendió por el resto del mundo con el modernismo de la Bauhaus y la forma de entender la ciudad de arquitectos como le Corbusier.

Pues bien, a  mi personalmente la ciudad racional de manzanas ortogonales me resulta realmente desagradable. Pero no por el hecho de tener calles rectas, sino por lo que conlleva este tipo diseños urbanos, a saber: ciudades organizadas en base a un funcionalismo de manual, división de usos, destrucción de la vida urbana, etcétera….

Y ante ese urbanismo tan extendido por las ciudades occidentales, nos encontramos con algunas  ciudades que han ido creciendo rápidamente de una forma diferente, con un urbanismo más orgánico, un pensamiento más en espiral en vez del pensamiento lineal de la cultura occidental, es decir, con una filosofía que para los occidentales no resulta muy chocante, en la que a veces el camino  más corto no es una línea recta. 

Romain Jacques-Lagréze nos da la oportunidad  de contemplar una ciudad diferente, y que nadie se confunda, porque no es sinónimo de suciedad, pobreza o ineficiencia, aunque algunos piensen lo contrario. El caos no es sinónimo de locura, eso es la excusa que muchos emplean para vivir egoístamente sin reglas. El desorden del caos tiene detrás reflexiones, formas de vivir, pensamientos muy meditados e incluso ordenados, de hecho, el resultado de un pensamiento “caótico”, es siempre mucho mejor que el del pensamiento ordenado, lo que sucede es que el proceso y el trabajo que necesitamos para obtener un buen resultado es mucho más largo, tedioso y tremendamente difícil, ya que resulta muy complicado trabajar en equipo, pero sin duda , es una opción que no podemos infravalorar tan a la ligera.

Visita la web del fotógrafo Romain Jacques-Lagréze: http://www.rjl-art.com

Sencillamente impresionante

Otra visión de una ciudad que te dejará boquiabierto