Cómo combatir las humedades en paredes y muros

Si tienes la mala suerte de tener humedades dentro de casa, y lo que es peor, aparece moho en esquinas y techos y no sabes como resolverlo, lee este artículo y quizás podamos ayudarte.

Primero. ¿Porque aparecen las humedades? y ¿qué tipos de humedades hay?

Principalmente las humedades que surgen en paredes y techos pueden ser causadas por dos motivos: 1-Filtraciones, 2-Condensación

1-Filtraciones. Cuando las humedades proceden de una filtración, la solución es relativamente sencilla: reparar la fuente de la filtración. Una filtración puede proceder de una fuga en alguna tubería de agua, una filtración en cubierta o incluso, agua de cuartos húmedos que se cuelan por las juntas de los azulejos mal selladas.

Cómo podemos solucionar las humedades en paredes y techos

La solución es relativamente sencilla. Hay que reparar la avería, bien sea impermeabilizando la zona dañada, repasando juntas de azulejos o reparando la tubería rota.

2-Humedades por condensación. Este tipo de humedades son más complejas, aunque menos llamativas. Veamos como solucionarlas.

Las humedades por condensación proceden de la humedad que hay en el ambiente y que tiende a condensarse en las partes frías de paredes y muros. Es lo mismo que ocurre cuando vamos en el coche en invierno y se condensa el vaho en los cristales o cuando nos duchamos y se terminan empañando las ventanas. 

El problema es que al condensarse el agua en paredes (que suelen estar revestidas de yeso) poco a poco va apareciendo el moho negro o incluso verde tan molesto estéticamente o incluso, a veces, dañino para la salud.

En todo caso, lo que debemos hacer es eliminar las condensaciones y evitar el moho. ¿ Y cómo lo hacemos? Veamos algunos casos y cómo actuar en cada uno de ellos.

Las tres medidas fundamentales que debemos implantar son : AISLAR BIEN PAREDES Y TECHOS, VENTILAR Y AUMENTAR LA TEMPERATURA INTERIOR. Estas tres medidas pueden combinarse o incluso actuar de forma independiente.

1-Caso 1. La condensación aparece en un cuarto húmedo, sin calefacción ni ventilación, por ejemplo el cuarto de lavado o dónde tendemos la ropa.

Este caso es el más sencillo de solucionar. Bastará con ventilar el cuarto donde aparece la condensación. Podemos abrir una ventana o utilizar un shunt. Tenemos que procurar que la humedad relativa del aire baje drásticamente, sobretodo cuando estamos lavando o produciendo un exceso de humedad. Si ventilamos, evitaremos que la humedad se condense.

2-Caso 2. Estamos en un ambiente relativamente seco y frio y sobretodo en invierno, se producen condensaciones en la pared y aparece el maldito moho.

En este caso, la medida más apropiada, sin olvidar siempre que la ventilación es imprescindible, es aislar mejor los cerramientos. Para mejorar el aislamiento tenemos varias opciones que podemos combinar entre si:

a-Mejorar el aislamiento de las ventanas.

b-Mejorar el aislamiento de paredes: Podemos hacerlo por fuera con el famoso SATE (sistema de aislamiento térmico por el exterior) o aislar por el interior (la mayoría de los casos  más barato y accesible que el SATE). Para aislar con el interior, podemos utilizar una capa de poliestireno de 4 o 5cm pegado a la pared y posteriormente trasdosado con una placa de pladur. Esta técnica es barata y sencilla y en casi el 100% de los casos resolveremos el problema.

c-Si no podemos aislar, sólo nos queda una opción: aumentar la temperatura interior y garantizar que no baja de los 20º (el limite depende de las condiciones de la zona). Pero claro, esto desde el punto de vista económico, puede que no sea viable, porque cuando nuestra casa esta mal aislada, el gasto en calefacción puede elevarse dramáticamente.

3-Caso 3. Estamos en un ambiente húmedo y frio, y nuestra casa esta mal aislada.

Este caso es el más delicado de resolver y no nos quedará más remedio que combinar todas las medidas que hemos citado anteriormente: AISLAR BIEN LA CASA, AUMENTAR LA TEMPERATURA INTERIOR Y ASEGURAR UNA BUENA VENTILACIÓN.

RECUPERADORES DE CALOR.

Cuando hablamos de ventilar, todos pensamos en abrir las ventanas, pensando que de esta forma cubrimos las necesidades de ventilación. Y esto es cierto en gran parte, pero no siempre, ya que muchas veces, tendríamos que tener la ventana abierta (aunque sea un poquito) casi durante todo el día para garantizar la renovación del aire, y eso, es sinónimo de perder calor.

Hoy en día, existen unos aparatos que cubren, por un lado la necesidad de ventilación y por otro la perdida de calor, se llaman recuperadores de calor y su misión es la de procurar la ventilación y la renovación del aire sin perder calor. Son muy eficientes y útiles y cumplen perfectamente su cometido, olvidándonos de tener que abrir las ventanas todo el día. Y ademas, su consumo es irrisorio, no llega a unos céntimos al día

Como conclusión, si tienes problemas de humedades por condensación ya sabes lo que tienes que hacer:

1º-Intentar que las paredes no estén tan frías, asegurando un buen aislamiento

2º-Aumentar la temperatura interior en invierno

3º-No te olvides de ventilar, y si puedes, instala un recuperador de calor.

Cómo combatir las humedades en paredes y muros

Cómo podemos solucionar las humedades en paredes y techos