En tu vivienda, ¿electricidad o gas?

En tu vivienda, ¿electricidad o gas?

Gas y electricidad, comparativa inicial

Antes de elegir entre uno y otro es ver cuál es nuestro consumo y en qué horas consumimos más. La calefacción es lo que más consume de una vivienda y, en este sentido, la mejor elección es el gas natural, puesto que es más económica.

La diferencia entre una caldera de gas o electricidad puede ser de unos 100 euros en una vivienda normal. Si hablamos de un unifamiliar donde vivan cinco personas se puede pasar de una gasto de 1.000 euros en gas a uno de 2.200 euros en electricidad.

Obviamente, una de las mayores diferencias en cuanto al gasto en uno u otro son los precios que cobre la comercializadora de electricidad o gas natural. Sin embargo, eso sólo determinará que el coste de uno u otro sea diferente, pero la diferencia seguirá siendo muy grande, debido a que un kilovatio hora de gas natural puede ser hasta un tercio más económico que uno de electricidad.

Si bien es cierto que hay aspectos en que sólo se puede usar electricidad (electrodomésticos) y que en muchas zonas de España aún no se dispone gas natural y la alternativa es el propano o el butano, lo cierto es que comparar entre gas y electricidad puede suponer un gran ahorro. La mayor comparativa entre luz y gas natural se da en cuanto a la calefacción y el agua caliente.

En relación a otros gases como el propano o el butano, se usan en aquellas zonas donde no se dispone de gas natural y el consumo en calefacción, agua caliente o cocina no sea muy elevado.

 

Consumo medio de gas en una vivienda. 

   Calefacción. 

Más del 40% de la factura de gas natural se relaciona con la calefacción y el Agua Caliente Sanitaria, por lo que el posible ahorro se convierte en algo básico. Según diferentes estudios, los gastos anuales españoles son de entre 750 y 950 euros. 

   Agua Caliente Sanitaria.

El consumo en Agua Caliente Sanitaria puede suponer una quinta parte de la factura de gas.

Consumo medio con electricidad en tu vivienda

   Calefacción.

El consumo normal de la calefacción eléctrica puede estar en torno a los 1.200 o 1.500 euros al año para una vivienda normal. Sin embargo, existen sistemas eficientes o que trabajan de noche (cuando la electricidad es más barata) que permiten reducir el gasto.

Aprovechando las tarifas nocturnas, esto permite que las tarifas se reduzcan. 

   Agua Caliente Sanitaria.

De la misma forma que en el gas natural, suele ser un quinto de la factura eléctrica.

Ventajas del gas natural.

   Ahorro a medio y largo plazo.

El coste del kilovatio hora es más económico por lo que el ahorro es mucho mayor con el gas.

   Suministro continuo. 

No suelen darse cortes o problemas de suministro como pueden dar en la Red Eléctrica Española.

   Utilización simultánea

Se puede usar para varias cosas a la vez como puede ser la cocina, el Agua Caliente Sanitaria y la calefacción. En relación a la electricidad, su uso simultáneo viene determinado por la potencia contratada en la vivienda, no pudiendo usarse más potencia de la contratada.

   Impacto medioambiental

Reduce la dependencia a combustibles fósiles como el gasoil.

Beneficios de usar electricidad en tu hogar

   Tarifas eléctricas nocturnas

Como hemos dicho, existen sistemas de calefacción que trabajan por la noche, cuando la electricidad es más barata. Este tipo de tarifas nocturnas nos permiten ahorrar en calefacción.

   Uso seguro

Si bien las instalaciones de gas poseen sistemas de seguridad que evitan la mayoría de peligros, lo cierto es que un escape de gas se puede dar y es muy peligroso.

   Medio ambiente

También se reduce la dependencia de los combustibles fósiles y, además, existen sistemas de energía renovable no contaminante que acaba de forma completa con la contaminación.

 

 

En tu vivienda, ¿electricidad o gas?

Si bien es cierto que hay aspectos en que sólo se puede usar electricidad (electrodomésticos) y que en muchas zonas de España aún no se dispone gas natural y la alternativa es el propano o el butano, lo cierto es que comparar entre gas y electricidad puede suponer un gran ahorro. La mayor comparativa entre luz y gas natural se da en cuanto a la calefacción y el agua caliente.