El iglú. La vivienda propia de los esquimales

El iglú. La vivienda propia de los esquimales. El iglú es un volumen semiesférico principal unido generalmente a otros secundarios más pequeños.

El iglú es la vivienda de los esquimales o inuits, que viven en condiciones climáticas extremas, principalmente en invierno, donde se pueden alcanzar temperaturas exteriores de -50°.

El iglú. La vivienda propia de los esquimales o inuits

El iglú esta formado por un domo principal al que se accede a través de túneles. El iglú está formado por distintos domos que sirven de almacén de carnes, ropas, o guarniciones. La estancia principal suele medir alrededor de 3 m de altura en el centro y tener un diámetro aproximado de 5 m.

El túnel de acceso a las distintas cámaras es de escasa altura y se encuentra levemente enterrado unos 50 cm para dificultar el paso del viento al interior de las cámaras.

También pueden existir iglús comunitarios donde se encuentren varias cámaras principales ocupadas por cada familia, así como otras destinadas a salas de reuniones, almacenes, etc….

Constructivamente el iglú está formado por bloques de hielo. Cada bloque mide 90 cm de largo, 50 cm de ancho y alrededor de 20 cm de alto, están biselados en los bordes para poder ir colocándolos en forma de bóveda.

El inuit va colocando los bloques desde el interior hasta llegar al punto más alto, la clave. La clave se coloca desde el exterior, siendo esta la última pieza de todo el conjunto.  Una vez terminado, se calienta el interior con una lámpara de aceite para derretir la primera capa de hielo, de manera que el agua que se va deslizando por el interior crea una capa, que ayudada por el enfriamiento rápido provocado por la apertura de la puerta, se convierte en hielo, sellando de esta forma, las juntas de los bloques.

El iglú es una vivienda adaptada a las condiciones del entorno y que se aprovecha del único material que existe en los alrededores helados de las inmensas tundras.

La geometría semiesférica del iglú garantiza una mínima superficie expuesta a los vientos y un volumen interior amplio.  El interior del iglú se protege con pieles de animales creando así una doble capa aislante. Por otro lado se intenta que las aperturas al exterior sean las mínimas posibles, de hecho la entrada tiene pequeñas dimensiones y suele estar protegida por barreras de nieve así como por distintas laminas de pieles a modo de puertas, que van creando cámaras aisladas.

Por otro lado el interior del iglú se protege de distintas formas, el suelo suele estar compuesto por ramas o  musgos y  las paredes están protegidas por pieles de animales.

El iglú suele tener pequeñas aberturas para permitir la entrada de luz y la ventilación. La entrada de luz se puede conseguir mediante trozos de hielo transparente o piel de intestino de foca.

El sistema constructivo utilizado por los inuits como vivienda tradicional, hoy en día  se está recuperando para crear complejos turísticos y hoteles donde la gente pernocta y vive en estancias excavadas en el hielo o  en la nieve.

®redactado por equipo editorial de arquitectura.vilssa

fuente de fotos:http://pinterest.com/search/pins/?q=iglu, arquitectura bioclimatica, J.Neila, http://hotelesia.com/hotel-iglu-grandvalira-dormir-a-lo-esquimal/