Consejos para un buen mantenimiento del suelo radiante

¿Sabías que el suelo radiante es uno de los sistemas más cómodos y eficientes que puedes instalar en tu vivienda actualmente? Sin embargo, como todos los sistemas de calefacción, se debe realizar el mantenimiento para evitar problemas que afecten a su rendimiento.

Un mantenimiento preventivo regular podrá alargar la vida útil del sistema. Por ello, en este artículo te damos todas las claves que necesitas saber para realizar el mantenimiento de manera correcta y evitar posibles averías.

Empecemos:

Un mantenimiento preventivo regular de tu sistema de suelo radiante podrá alargar la vida útil del sistema. en este artículo te damos todas las claves que necesitas para conseguirlo.

¿Cada cuánto tiempo debo revisar el suelo radiante?

Tanto la revisión como la limpieza del suelo radiante se debe hacer con cierta regularidad para evitar problemas de funcionamiento. Y no solo para prevenir en épocas invernales, sino también en temporadas de calor donde apenas usamos la calefacción. Regular los parámetros del sistema, optimizar la puesta en marcha y asegurarnos de que funciona todo correctamente, son solo algunas de las revisiones que debemos tener en cuenta. Por el contrario, si no se revisa de manera periódica, podemos desaprovechar la alta eficiencia de estos sistemas.

Si no lo tienes del todo claro sobre cada cuanto tiempo debes revisar tu suelo radiante, el fabricante o un instalador especializado podrá darte las indicaciones pertinentes para poder realizar el mantenimiento de manera eficiente. Además, si el instalador encuentra alguna avería mientras realiza el mantenimiento, sabrá encontrar solución en el preciso instante.

¿Qué tipos de mantenimiento de suelo radiante existen?

El mantenimiento del suelo radiante, se puede diferenciar en dos tipos dependiendo si queremos prevenir averías o debemos reparar ya algunas averías existentes. De este modo, diferenciamos entre mantenimiento preventivo y correctivo.

Mantenimiento preventivo: Se centra en prevenir posibles averías de funcionamiento. Conjuntamente con la limpieza, se comprueba el sistema y su funcionamiento al completo. Esto evitará que tengamos grandes desembolsos para arreglar averías mayores y controlaremos que el interior del circuito se mantenga en buen estado y sin estancamiento.

Mantenimiento correctivo: A diferencia del mantenimiento preventivo, primero se arreglan las averías y luego se comprueba el funcionamiento. Se centra en la reparación de los desperfectos o fallos que puedan aparecer debido al uso o a los problemas del propio sistema. Luego por último, si todo funciona correctamente, se limpia.

Consejos para realizar el mantenimiento del suelo radiante

Para disfrutar más tiempo del confort que ofrece la calefacción por suelo radiante debemos conocer algunas medidas a tomar. Por supuesto, se deben realizar de manera eficiente y combinarlas con revisiones periódicas:

Revisión de los caudalímetros

Los caudalímetros nos ayudan a tener un control del consumo sobre la cantidad de agua y presión que se envía por los tubos del suelo radiante. Se debe verificar que están correctamente calibrados para asegurarnos que la distribución del agua se realiza de manera uniforme.

Control de lodos

Esto es uno de los problemas que se puede presentar en el interior de los tubos del suelo radiante. Debemos comprobar que la instalación de calefacción funciona a la perfección y no existe la formación de lodo. Para este tipo de revisiones si debemos pedir ayuda a un profesional que se encargue de ello.

Regulación de los circuitos de forma independiente

El suelo radiante está formado por varios circuitos de tuberías que recorren las diferentes estancias de la vivienda. Se debe regular cada uno de ellos de forma independiente y esto lo logramos a través del caudalímetro. Asegurarnos que llega la cantidad exacta de agua y la temperatura correcta a cada parte de la estancia sin que se produzca ninguna obstrucción. Con este mantenimiento lograremos que la temperatura en las diferentes zonas de la vivienda sea la esperada.

Limpieza del suelo radiante

La limpieza del suelo radiante debe ser llevada a cabo por un profesional ya que es necesario vaciar todo el contenido de agua de la instalación y manipular algunos aditivos de limpieza. El profesional debe limpiar los colectores y los circuitos con agua a presión para luego pasar a la limpieza de válvulas. Una vez que tenemos todo limpio y el agua extraída, volvemos a llenar el sistema con agua y un líquido aditivo de desinfección. Este nos ayudará a realizar una limpieza más profunda eliminando impurezas, presencia de microorganismos, lodo y evitar corrosiones.

Tras esta fase, volveremos a extraer el agua con el aditivo que se encuentra en el interior del circuito. Por último, incorporamos nuevamente agua sin aditivos al circuito y comprobamos su correcto funcionamiento. Para la limpieza del pavimento debemos elegir un liquido de limpieza adecuado al tipo de material. Es decir, para un suelo laminado requiere un tipo de liquido diferente a un suelo de madera.

¿Cuáles son los problemas más comunes del suelo radiante?

1. Deterioro del sistema y conexionado

Como todo sistema, el paso del tiempo y los fluidos que circulan pueden deteriorar algunas partes del sistema. Por ello, no solo se debe hacer mantenimiento al suelo radiante, sino también a la bomba o caldera suministradora, a las válvulas de control de fluidos y a las tuberías o mangueras por donde circula el agua.

2. Consume más energía de la esperada

Si observamos un consumo más alto de lo normal puede ser síntoma de que nuestro sistema de calefacción no funciona correctamente. Un mantenimiento adecuado nos ayudará a controlar el consumo energético y prevenir posibles sobrecostes en las facturas a final de mes.

3. Agua en mal estado

El estado del agua que circula a través de las tuberías y el sistema en general también importa. Puede que se produzca oxidación en el interior de los tubos si no se realiza un mantenimiento con frecuencia. El agua se convierte en lodo y afectará en gran medida al funcionamiento del sistema.

4. Posibles fugas de agua

Las fugas de agua derivan en manchas o humedad que levantan los suelos, rompiendo y afectando a la estructura de la vivienda. La aparición de estas fugas puede darse por sobre presiones o instalación incorrecta. Este tipo de averías si no se controlan con tiempo pueden acarrear grandes costes de obra. Por eso la importancia de una mantenimiento preventivo de manera periódica.

5. Pérdidas de transmisión de calor

Si se producen obstrucciones en algunos puntos de circulación del agua, puede que el calor no se reparta equitativamente en las diferentes partes de la estancia. Este problema da como resultado un funcionamiento menos eficiente y debe realizarse una limpieza para poder eliminar este problema del circuito.

Recomendaciones de uso del suelo radiante

La calefacción por suelo radiante es uno de los sistemas con más eficiencia del mercado y que menos mantenimiento requiere en todo el año. Eso sí, aunque el mantenimiento es sencillo y no tan frecuente como en otros sistema, no se debe olvidar. Esto hará que el funcionamiento sea correcto y las facturas no se vean incrementadas por gastos de reparaciones/averías. Para evitar esto es ideal encender la calefacción, no solo en épocas de frio, sino también en épocas de verano aunque sea a baja temperatura. Sobre todo para que los conductos y conexiones puedan arrastrar posibles creaciones de lodo o microorganismos que se encuentren.

Además una de las recomendaciones más usadas es instalar un sistema de decantación para lodos en la caldera o bomba de calor. Este nos ayudará a separar gases y sólidos en suspensión que luego serán evacuados tras la depuración. Con este sistema, nuestros circuitos del suelo radiante pueden contener una mejor calidad de agua por más tiempo.