Ventajas y desventajas del suelo radiante

Ventajas y desventajas del suelo radiante. El suelo radiante es una instalación de calefacción principalmente, qué consiste en calentar los suelos de nuestros edificios para climatizar las distintas estancias.

El sistema de suelo radiante también se puede emplear para refrigerar nuestros edificios, aunque el uso más común es el de calefacción.

Ventajas y desventajas del suelo radiante como sistema de calefacción en nuestros edificios

¿En qué consiste el suelo radiante?. El suelo radiante consiste en realizar un circuito de tuberías que van ocupando toda la superficie del suelo a modo de serpentín. Por estas tuberías se hace circular un líquido caliente, previamente calentado en un equipo de generación de calor. El sistema es muy parecido al que se emplea con los radiadores, la única diferencia es que en este caso, las tuberías circulan bajo suelo.

Ventajas del suelo radiante.

Probablemente el suelo radiante es el sistema de calefacción más eficiente de todos, sin embargo, esto no quiere decir que sea el mejor y el único. La instalación de  un suelo radiante debe estar determinada por los condicionantes de uso, condicionantes climáticos, y los condicionantes geográficos.  La eficiencia de una instalación de calefacción por suelo radiante dependerá de todos estos factores.

La mejor combinación de una instalación de suelo radiante es con suelos de materiales de gran inercia térmica, por ejemplo: piedras, terrazos, gres, etcétera. Estos materiales acumularán el calor más o menos rápido, y lo irán cediendo poco a poco al ambiente. Esto hace que la instalación de suelo radiante gane en eficiencia energética.

El suelo radiante hace que el aire se caliente a nivel de suelo, esto facilita que el polvo no ascienda a capas superiores. El nivel de confort de  una calefacción con suelo radiante es superior al de otros sistemas, ya que este tipo de instalaciones permite un calentamiento homogéneo de toda la superficie.

Desventajas del suelo radiante.

La instalación de suelo radiante puede resultar muy cara, esto hace que sea muy importante estudiar los condicionantes externos para confirmar la viabilidad de este tipo de instalación.

Una instalación de suelo radiante necesita un equipo de generación de calor, este equipo puede ser una caldera convencional, una caldera de condensación, una bomba de calor, etc. la fuente energía también puede ser diversa: electricidad, gas, gasóleo, geotermia. La eficiencia de la caldera es la que hará  que la instalación sea rentable o no, una caldera eléctrica resulta muy poco aconsejable como generador de calor, por el contrario, una bomba de calor apoyada por la energía geotérmica resulta el sistema más eficiente de todos.

Por último, indicar que no es lo mismo un suelo radiante de resistencias eléctricas que un suelo radiante con un  circuito de liquido. La resistencia eléctrica es un sistema muy poco eficiente y demasiado caro. Su instalación debe estar muy condicionada por determinantes muy concretos, por ejemplo: un uso de un espacio esporádico y que tengo que ser calentado en poco tiempo, puede optar por una instalación de suelo radiante eléctrico en un suelo de madera o de chapa. En este caso, quizás la instalación si sea eficiente y rentable, sin embargo, en la mayoría de usos domésticos, utilizar un suelo radiante eléctrico no es una buena opción.

®redactado por equipo editorial de construcción.vilssa