La plaza de Maria Pita en la Coruña
La plaza de María Pita en la Coruña. Los que visitan la ciudad de A Coruña, pasean obligadamente por la plaza de María Pita, hito obligado en cualquier ruta por la ciudad atlántica. No es ni la más antigua, ni posiblemente la más pintoresca, pero sin duda, es la más sublime de todas las plazas de la antigua ciudad.
Breve historia de La Coruña. Debió existir aquí, desde tiempos muy antiguos, un puerto que puede estar relacionado con viejos asentamientos de fenicios y griegos y a donde posteriormente llegaron las naves romanas. La Coruña sufre en la Edad Media, así como muchas villas de la cornisa cantábrica, los ataques de pueblos normandos, lo que hace que su desarrollo sea muy lento y comedido, hasta que en el año 1212 se le concede el correspondiente fuero. Dicen numerosos documentos que ya desde la temprana edad media desembarcaban en su puerto peregrinos camino de Compostela, lo que ayudado por los numerosos intercambios comerciales y el privilegio que le concede Alfonso X para descarga y depósito de sal en 1255, contribuye al crecimiento y desarrollo de La Coruña.
La plaza de Maria Pita en Coruña, un lugar de trazado regular hito actual de la ciudad
La historia urbana de la ciudad es, hoy en día, difícil de descifrar, hay autores que consideran que el crecimiento urbano debió realizarse en torno a las parroquias más antiguas, Santiago y Santa María del Campo, y los conventos de Santo Domingo y la Bárbaras, lugares alrededor de los cuales fueron levantándose numerosos edificios y espacios de encuentro e intercambio. Así pues, la reuniones del Concejo se celebraban en el pórtico de Santiago primeramente, trasladándose luego a los entornos del convento de Santo Domingo para posteriormente, a partir del siglo XVI, disponer de un espacio propio en la plaza de la Harina, que se convertirá en el centro representativo del casco viejo.
La Coruña destaca también, al igual que en numerosas ciudades de la costa cantábrica, la proliferación de soportales en sus calles, estructuras muy difundidas durante la época medieval en todo el norte y noroeste de la península ibérica y que posteriormente han ido desapareciendo con la adaptación de las calles a los vehículos.
La plaza de María Pita en la Coruña. Aunque en La Coruña existen otras plazas, como la plaza de las Bárbaras, un coqueto entorno sencillo aledaño al convento de Santa Bárbara, la plaza de María pita destaca, hoy en día, sobre el resto por su tamaño y ser el lugar donde se encuentra el ayuntamiento. Se trata de una plaza de planta regular cuadrada, todo un símbolo de la ciudad, a la altura de las grandes plazas mayores de otras ciudades españolas, y cuyo trazado corresponde a las inquietudes de la ciudad neoclásica del siglo XIX.
Cuando desaparece la muralla, entre los años 1840 y 1869, se abren amplios solares que pronto serán ocupados por el crecimiento de la ciudad. De esta forma se va forjando la imagen de la ciudad moderna e industrial, borrando algunas de las huellas de la ciudad antigua, esa ciudad aparentemente desordenada y sobre la que se dibujan ahora líneas rectas y ordenadas. En el espacio intermedio del campo de San Agustín, cuyo convento fue usado como Ayuntamiento tras la desamortización, el arquitecto José María de Noya concibe a mediados del siglo XIX el regular contorno de la plaza mayor, enlace de la ciudad alta y la pescadería.
Aunque la plaza de María Pita sufre numerosas transformaciones hasta que se considera finalizada a principios del siglo XX, destaca sobre otras plazas mayores por tratarse de un espacio semi abierto. El Ayuntamiento, en el frente norte, se halla en una posición exenta, abriendo hacia el norte dos pasos de grandes dimensiones. El Ayuntamiento destaca sobre el resto del caserío por su suntuosa Arquitectura. El resto de salidas de la plaza, hacia poniente hacia la Pescadería o en el sur, hacia la Marina, se resuelven con calles porticadas.
Destaca la arquitectura doméstica de los tres frentes, que aunque pretenden cierta uniformidad, introducen significativas características. Son llamativos los balcones corridos o aislados, las terrazas en los áticos y las galerías de los cuerpos altos con sus estructuras transparentes. Galerías muy repetidas en toda la arquitectura de la Coruña. En la plaza de María pita una ordenanza del año 1854 prohibía la colocación de tales galerías en los pisos primero y principal, evitando así los miradores hacia el gran espectáculo de la plaza.
Hoy en día, aunque la plaza de María pita conserva su singular imagen, ha perdido la función de espacio de intercambio y comercio, transformándose en un lugar turístico de atracción donde abundan bares y restaurantes, aunque mantiene su carácter de centro neurálgico por encontrarse en ella el ayuntamiento.
®redactado por equipo editorial de urbanruta
La plaza de Maria Pita en la Coruña
La plaza de Maria Pita en Coruña, un lugar de trazado regular hito actual de la ciudad