Características del muro trombe

Arquitectura bioclimática, muro trombe. El muro trombe es uno de los sistemas más conocidos dentro de la arquitectura bioclimática. Se fundamenta en el aprovechamiento de la radiación solar y la transmisión de calor por convención. Fue ideado por Felix Trombe y el arquitecto Jacques Michel en 1967. En realidad se trata de una variación del concepto de invernadero, es decir hacer que el calor se quede confinado en un espacio limitado por un vidrio y una pared opaca.

La radiación solar, al atravesar el vidrio incide directamente sobre una superficie masiva (de color oscuro para evitar la reflexión). Es un muro de gran inercia térmica que al calentarse ayuda a que la masa de aire que hay entre el muro  y el vidrio se caliente, este calor se transmite por convención al interior del edifico. Para transmitir este calor es necesario que existan unas aberturas dentro del muro y que conecten la cámara de aire con el interior. Dichas aberturas se suelen colocar en la parte inferior y en la parte superior del muro para facilitar de esta forma la convención del aire. El aire caliente tiende a subir por lo que se produce una ventilación natural desde las partes inferiores a las partes superiores. El aire frio, estratificado a nivel de suelo, se calienta y sube hasta la parte superior de la habitación. En principio, es suficiente con unos pequeños orificios en el muro.

Características del muro trombe, ventajas y morfología

El muro trombe tiene que tener una orientación a sur, ya que su eficiencia se basa en el mayor aprovechamiento de radiación solar posible. Esto coincidirá con las horas de mayor incidencia solar, pero una vez que el sol deje de calentar, se cortará el proceso, con lo que en las horas nocturnas podría existir una perdida de calor.

Para evitar este efecto se recurre a otro mecanismo. Durante las horas de sol, el aire se calienta gracias a la radiación solar y al efecto de la inercia del muro, dicha inercia podríamos utilizarla para ceder calor a la parte interior, sin embargo, esto no sería muy eficiente, ya que para poder atravesar el calor todo el espesor del muro, deberíamos esperar muchas horas y en todo caso sólo el 5% del calor lograría atravesarlo, el 95%restante se reflejaría hacia la cara exterior(la gran inercia del muro, necesaria para poder aprovechar mejor el calor de la cámara de aire durante el día, hace que ese calor no pueda atravesarlo fácilmente, lo que hace que no lo podamos aprovechar por la noche). Para solucionar esto, lo que hacemos es aprovechar este calor reflejado por el muro durante la noche, evitando que se escape por el vidrio. Esto lo conseguiremos mediante la incorporación de una persiana exterior o cualquier elemento, preferiblemente muy bien aislado. De esta forma el proceso continuará durante las horas nocturnas, mientras que el muro desprende todo el calor acumulado durante el día.

Para dimensionar o proyectar un muro trombe, tendremos que considerar muchas variables: orientación, situación geográfica, uso de estancias al otro lado del muro, inercia de los materiales, radiación solar, etc… En ocasiones el mal dimensionado de este tipo de sistemas puede provocar efectos contrarios. Lo mejor es que sea un técnico especializado quién te aconseje acerca de la viabilidad del muro trombe o de cualquier otro mecanismo para  tu vivienda o edificio.

®redactado por equipo redactor de arquitectura.vilssa

fuente foto: http://jordicerdanya.blogspot.com.es