Un nuevo material que podría sustituir al acero

Un nuevo material que podría sustituir al acero: el grafeno. El hierro ha sido un material utilizado en construcción desde muy antiguo, ya nuestros antepasados lo utilizaban para anclar los bloques de piedra entre sí, aunque de una forma muy simple. No es hasta el siglo XIX cuando el hierro se comienza a utilizar de forma masiva gracias a la combinación de distintas variaciones que hacen mejorar las características físicas de este, convirtiéndolo de esta manera en acero y en otras aleaciones.

A partir del siglo XIX los materiales férricos  suponen una auténtica revolución en el mundo de la construcción, apareciendo estructuras como la torre Eiffel que muestran al mundo las posibilidades de este material, si no hubiese sido por el desarrollo del hormigón y su combinación con el acero formando hormigón armado, posiblemente las estructuras metálicas hubiesen tenido mayor protagonismo en nuestros edificios.

El grafeno es un material cuyas características podrían hacer que sustituyese al acero

El acero aporta flexibilidad y elasticidad al hormigón, que e caracteriza por tener  una gran  resistencia a la comprensión, consiguiendo de la combinación de ambos un material muy resistente para todo tipo de estructuras, tanto en obra civil como en edificación.

Los dos materiales tiene sus ventajas y sus inconvenientes, por ejemplo el hormigón es un material que requiere una gran cantidad de energía para producirlo y resulta muy contaminante, sin embargo, el acero, es un material reciclable que puede tener una vida útil casi infinita pero  se ve afectado por la oxidación y la corrosión.

Un nuevo material que podría sustituir al acero. El acero  tiene entre sus desventajas, su peso, lo que supone un hándicap  cuando buscamos estructuras que requieren una gran ligereza, por ejemplo, no resulta eficiente hacer un coche o un avión de acero y por eso se emplean otros materiales como el aluminio, aunque sean menos resistentes.

Pues bien, hoy te mostramos un material creado por los investigadores de la Universidad tecnológica de Sidney y que en un momento dado puede sustituir al acero. Se trata de un compuesto derivado del grafeno, obteniendo un material tan fino como el papel, pero muchísimo más resistente.

Este material  podría revolucionar el mundo de la aviación, de la automoción o incluso de la construcción.

El material se obtiene al manipular la estructura del grafito que es la materia prima, consiguiendo de esta forma un material tan fino como el papel, pero que si lo comparamos con el acero, es seis veces más ligero, tiene seis veces menos densidad, tiene 10 veces mayor resistencia a la tracción y 13 veces más rigidez de flexión.

Si el acero es conocido por sus buenas cualidades y resistencia a la tracción, este nuevo material derivado del grafito, podría, en un futuro cercano, sustituir al acero en las estructuras de nuestros edificios de hormigón armado.  A diferencia del acero, el grafeno no se vería afectado por la oxidación y corrosión, y su mayor ligereza nos proporcionaría estructuras menos pesadas.

Lo cierto que ya hoy en día se utilizan otro tipo de materiales para aportar al hormigón la resistencia a tracción que necesita, por ejemplo las fibras de vidrio, pero lamentablemente, estos nuevos materiales combinados suele resultar mucho más caros que el hormigón armado tradicional.

En todo caso, el futuro de la construcción, sobre todo si tienen cuenta la sostenibilidad, pasará por encontrar algún material que tarde o temprano termine sustituyendo al hormigón y sea igual de económico y eficiente, pero más sostenible, y en la medida de lo posible, reciclable.