Combarte el calor dentro de tu casa con las sales antihumedad
Las sales antihumedad. Una buena forma de combatir el calor.
Existen tres parámetros que inciden directamente sobre la temperatura efectiva, es decir sobre nuestra sensación de calor: la velocidad del aire, la humedad relativa y la radiación solar. Para calcular la temperatura efectiva se utilizan más variables, como el arropamiento, el tipo de actividad, etcétera. Pero a la hora de diseñar un edificio, la humedad relativa, la radiación y la velocidad del aire son variables que podemos modificar en función al diseño arquitectónico.
La humedad relativa y las sales absorbentes de humedad en el diseño de nuestros edificios. La humedad relativa del ambiente es un parámetro muy difícil de controlar. De hecho, en verano, en los ambientes húmedos, nuestra sensación de calor aumenta. Podría decirse que el hecho de que el ambiente este saturado, impide que nuestro cuerpo sude correctamente y con ello, reduzca su temperatura interior.
Las personas nos encontramos en una situación de confort entre el 30 y el 70% de humedad relativa, por lo que debemos procurar no superar este valor del 70% de humedad, por ejemplo, pasar del 30 al 80% de humedad relativa supone incrementar la sensación de calor en 4 °C.
Las sales antihumedad en arquitectura, y su aplicación como estrategia para reducir la sensación de calor
Por ello, una estrategia muy interesante para reducir la sensación de calor en el interior de nuestros edificios, consiste en intentar reducir la humedad del ambiente. Para ello, disponemos de dos tipos de medidas, las medidas activas, que consisten en la utilización de mecanismos artificiales: ventilación, aire acondicionado, etc...,que reducen la humedad relativa del aire, y los medidas pasivas, que tienen que ver con el diseño del edificio.
En realidad reducir la humedad relativa del aire interior de nuestros edificios es muy complicado utilizando medidas pasivas. Sin embargo, existen unas sales antihumedad que absorbe la humedad del aire y nos pueden ayudar en nuestro propósito.
Las salas antihumedad absorbentes. Estás sales absorben de forma natural la humedad del aire transformándose en un gel. El cambio de estado es reversible, de manera que si se calientan eliminan la humedad que habían absorbido y recuperan su estado sólido.
¿Cómo podemos aplicar este tipo de sales absorbentes antihumedad en el diseño de nuestros edificios?. Te mostramos una posibilidad interesante para diseñar un edificio que incorpore esta estrategia para reducir la humedad relativa del aire.
La idea consiste en colocar bancadas de sales absorbentes de la humedad situadas en mallas por las que pueda circular el aire de forma natural y hacia las que pueda ceder parte de su humedad.
Antes de introducir el aire en nuestro edificio de forma natural desde el exterior, debemos hacer pasar dicho aire por estas bancadas.
Para que las sales recuperen su estado inicial, es decir el estado solido y expulsen la humedad absorbida, debemos someter de nuevo a las bancadas a una corriente de aire. El ciclo de entrada y salida del aire se alterna. Según la hora del día, se podría conseguir el efecto de absorción y el desecado de las sales. Durante la mañana, cuando el sol incide en la pared este, el recalentamiento del aire de esa fachada facilitará su salida y la inducción de aire más fresco de la fachada opuesta, la oeste ,el aire que entra por el oeste se deshumedece cediendo parte de la humedad a la sales secas de esa fachada. Al mismo tiempo, las sales de la fachada este se secarán por efecto del sol y por la corriente de aire. Por la tarde, la fachada que recibirá el sol es la oeste, y se invertirá el sentido de la circulación del aire y el proceso de secado y humedecimiento de las sales.
Fuente de artículo y foto : Arquitectura bioclimática. F.J.Neila
®redactado por equipo editorial de construccion.vilssa
Combarte el calor dentro de tu casa con las sales antihumedad
Las sales antihumedad en arquitectura, y su aplicación como estrategia para reducir la sensación de calor