Cerramientos y paredes. Orientaciones óptimas de cerramiento

Cerramientos y paredes. Orientaciones óptimas de cerramiento. Las orientaciones óptimas de los cerramientos de nuestras viviendas vienen, en la mayoría de los casos, determinadas por el diseño urbano de las calles y las manzanas de nuestras ciudades. Un diseño que, en  muchas ocasiones no ha tenido en cuenta las orientaciones óptimas en cuanto al soleamiento o los vientos dominantes.

Existen mecanismos u sistemas para regular la radiación que incide sobre un cerramiento: elementos arquitectónicos, vegetación, etcétera. No obstante, el punto de partida debería ser siempre el diseño inicial y el análisis de las orientaciones óptimas para los cerramientos.

Estrategias para evitar el sobrecalentamiento. Orientaciones óptimas de los cerramientos y fachadas

En principio, el criterio  sobre el qué se debe fundamentar la orientación de un cerramiento, es el mismo que utilizamos para la distribución de los huecos de ventanas. Éste criterio considera que las mejores orientaciones son aquellas que consiguen mayor captación de calor en los meses fríos y las mínimas captaciones de calor en los meses calurosos.

Por lo general, las orientaciones  más favorables son la norte, la noreste y la noroeste, y las mas desfavorables son las orientaciones oeste y este, la cubierta plana, la suroeste y la sureste, por este orden. La fachada sur quedaría en un punto intermedio.

Las cubiertas son puntos delicados en cuanto al sobrecalentamiento por recibir una radiación directa y perpendicular de los rayos del sol en las épocas más calurosas. Por otro lado, las orientaciones este y oeste son orientaciones donde resulta muy complicado protegerse de la radiación directa, debido a que, al igual que sucede con los huecos y ventanas,  el sol incide de manera paralela a la fachada.

Aunque a alguno le pueda resultar llamativo, las fachadas orientadas a sur, en el cómputo global de todo el año, no son las más penalizadas respecto al sobrecalentamiento, ya que en los meses fríos, permiten una mayor captación de calor que el  resto de orientaciones.

En conclusión, las orientaciones óptimas de cerramiento se puede decir que son aquellas que resultan ser las menos malas. No existen normas o pautas fijas que puedan ser aplicadas a cualquier lugar del mundo y en cualquier clima, cada caso exigirá un estudio singular y pormenorizado.

Sin embargo, si podemos establecer algunos consejos que pueden servir como punto de partida para encontrar la mejor orientación para nuestros edificios y viviendas:

Las mejores orientaciones en cuanto a los cerramientos coinciden siempre en edificios entre medianerías, siempre y cuando, partan de un inteligente diseño urbano. Por ejemplo, orientaciones de edificios con las fachadas a la calle orientadas a norte y a sur y donde las fachadas este y oeste sean medianeras.

En el caso de edificios exentos, las mejores orientaciones posiblemente coincidan con las orientaciones norte y sur en la mayoría de las latitudes (procurando, por lo tanto, que las fachadas más largas coincidan con estas orientaciones). Y la cubierta será siempre un punto delicado, por lo que  lo ideal es que tenga superficies lo más reducidas posible.

Los edificios de volúmenes compactos, formas optimizadas y perímetros minimizados serán, por lo general, los que desde un punto de vista energético, se comportarán de manera más eficiente. Sin embargo, en contra, este tipo de diseños compactos no podrá jugar con las luces y las sombras para provocar protecciones pasivas frente al sobrecalentamiento.

®redactado por construccion.vilssa