Sobre los derechos de propiedad intelectual en internet.

Sobre los derechos de propiedad intelectual en internet. Hoy escribimos este artículo a raíz de una pequeña queja que hemos recibido en nuestro blog sobre una fotografía que aparecía publicada en uno de nuestros artículos. Dicha fotografía, como muchas otras, fue obtenida en su momento de una fuente de Internet, y como en tantas otras ocasiones, se citaba la fuente de la misma (aunque no era directa, hecho que puede que fuese el objeto de la queja).

Los problemas de escribir y publicar fotos en los blogs

Lo cierto es, que ante los ojos de la ley, incluir una fotografía en un artículo publicado en un blog requiere los permisos del propietario siempre y cuando está tenga reservados los derechos de autor. A nosotros este tipo de leyes nos parecen correctas en la mayoría de los casos, ya que de lo contrario, muchas personas se aprovecharían del trabajo de otras.

Los problemas de escribir y publicar fotos en los blogs

Pero lamentablemente las leyes son ante todo objetivas, y su aplicación se caracteriza por  una falta de flexibilidad que muchas veces resulta más dañina que los propios   actos que está pretende evitar.

Por ejemplo, analicemos nuestro caso concreto: nosotros escribimos en un blog una serie de artículos que en algunas ocasiones nos puede llevar hasta varias horas elaborar, el 100% de su contenido es original y cuando tenemos que transcribir un texto escrito por otra persona citamos la fuente, lo resaltamos como tal, etcétera. En la caso de las fotografías, resulta mucho más complicado obtener una imagen elaborada por nosotros mismos, y por eso buscamos imágenes que no tengan derechos de autor, lo que no es nada sencillo, ya que en internet esta tendencia es todavía demasiado reciente y la mayoría de la gente que sube fotos a la red no suele definir bajo qué condiciones puedes utilizar su imagen.

Bueno, vayamos al grano. El hecho es que recientemente publicamos un artículo en el que adjuntamos una fotografía y al final de dicho artículo citamos la fuente de dicha fotografía. Hace unos días recibimos un e-mail en el que se nos solicitaba, muy amablemente, que retirásemos dicha imagen por considerar que era propiedad de su autor y no teníamos autorización para publicarla, todo ello bajo amenaza de posibles acciones legales.

Naturalmente procedimos a retirar esta fotografía y a pedir disculpas de manera inmediata, ya que no era nuestra intención perjudicar a nadie. Lamentamos enormemente la confusión, ya que, como comentamos a continuación  pensamos que en realidad le hacíamos un gran favor al propietario de dicha foto (en este caso una empresa). Queremos decir que estamos totalmente de acuerdo con la persona que realizó la queja y por supuesto entendemos que es la obligación de todos cumplir las leyes, sin embargo, lo curioso de esta situación es lo siguiente:

El artículo en cuestión trataba sobre un producto que nosotros habíamos estudiado y que nos parecía muy interesante, y que por otro lado, por otros motivos, estábamos interesados en conocer  y saber quién lo comercializaba para comprarlo. En dicho artículo describíamos el producto de manera objetiva, pero resaltando sobre todo sus virtudes y ventajas, por lo que sin duda, entendemos que beneficia a la empresa que en un momento dado lo puede comercializar (bastante pocas por cierto). Naturalmente, no se trataba de un artículo promocional sino  de una visión objetiva y totalmente imparcial.

Lo que no resulta realmente curioso, es que se nos amenazase con acciones legales si no retirábamos la fotografía del artículo, en vez de pedirnos que hiciésemos más visible la fuente de la foto o incluso pedirnos que diésemos a conocer mejor a quien lo comercializa, lo que sin duda es un beneficio publicitario para la empresa muy interesante. Esto es lo que realmente nos resulta muy chocante, ya que, aunque es cierto que hay una ley que lo ampara y nosotros utilizamos una foto que parece que no tenia licencia libre, no sé qué sentido tiene amenazar de esa manera tan absurda, cuando en realidad si se piensa fríamente, el único beneficiado es la empresa.

Pues bien, nosotros pedimos sinceramente disculpas a la empresa que nos solicitó que retirásemos dicha foto, porque no era nuestra intención perjudicarlos (aunque todavía no sabemos como podríamos haberlo hecho). Quizás ellos puedan pensar que nosotros obtenemos  un gran lucro a costa de su fotografía, pero lamentablemente no es así, ya que los pocos ingresos que se obtienen de la publicidad en un blog de este tipo, a duras penas cubren los costes de mantener abierta esta publicación, y si la razón por la que se nos solicita que retiremos la fotografía es por considerar que está ocasionando un daño, volvemos a reiterar nuestras más sinceras disculpas.

La verdad es que el debate sobre esta cuestión es realmente interesante y no está lejos de acabarse, ya que el mundo de Internet nos ofrece la posibilidad de difundir de manera casi inmediata una gran cantidad de información, lo que conlleva ventajas y desventajas.

Lo que si podemos deciros es que a raíz de este incidente hemos decidido que a partir de ahora muchos de nuestros artículos no tendrán fotografías o las tendrán aunque sean sobre otro tema, ya que no queremos tener ningún problema en el futuro, aunque creemos que  esta medida perjudica más que beneficia, no sólo a nosotros, sino a nuestros lectores y sinceramente, por ejemplo en el caso de un producto, a la empresa que lo fabrica y que gracias a nuestro artículo podría obtener más clientes.

No se trata de permitir utilizar el trabajo de los demás para lucrarnos nosotros, sino de saber compartir el conocimiento y saber establecer límites. Límites que tienen muchas veces que saber adaptarse a la realidad y no convertirse en normas estáticas que terminan haciendo más daño que beneficio.

Y en el peor de los casos, se trata también de saber dialogar sin necesidad de realizar amenazas o adoptar posturas radicales.

No vamos a desvelar de qué artículo se trataba ni a qué  empresa nos referimos (no vamos a publicitarla altruistamente después del incidente), pero si os podemos decir que dicho artículo en más de un año que lleva publicado, sólo ha generado 1,5€ y nos llevó escribirlo 30minutos.

Y como hecho curioso, doy por supuesto que antes o después esta empresa mandará emails publicitarios a listas de correos con direcciones privadas conseguidas de manera más o menos “legal”. En fin, vivimos en un mundo muy curioso.

Sobre los derechos de propiedad intelectual en internet.

Los problemas de escribir y publicar fotos en los blogs