Patologías del ladrillo. Parte II.

Patologías del ladrillo. Parte II. Como ya hemos comentado en la primera parte de este artículo, las patologías que aparecen en las fábricas de ladrillo pueden estar originados por diferentes factores.

En esta segunda parte vamos a hablar de las lesiones provocadas por el agua. Las patologías del ladrillo cuyo origen está en la acción del agua, se pueden deber, bien a  la acción directa del agua de lluvia o a los efectos del agua por acción de la capilaridad o por las condensaciones.

Patologías del ladrillo. lluvia, capilaridad, eflorescencias, condensación, retraccion y dilatación, corrosión

El agua de lluvia: el ladrillo tiene cierta permeabilidad, por lo que la exposición prolongada a los efectos del agua de lluvia, puede producir manchas de humedad en el intradós del muro. Por ejemplo, para que el agua penetre en un muro de 50 cm, es suficiente la acción del agua durante  dos semanas.

Capilaridad: Se produce por la ascensión del agua a través de los poros y capilares de ladrillo y del mortero, a causa de la naturaleza porosa de los materiales. El agua puede ascender por capilaridad entre 1,5 m y 2 m. Por ello los daños provocados por capilaridad, suelen producirse a cotas bajas, donde el muro entra en contacto con el terreno. Cortar el muro mediante láminas impermeabilizantes en su base, es una medida muy apropiada para evitar los daños provocados por la capilaridad.

Eflorescencia: las eflorescencias son depósitos de sales minerales solubles que aparecen sobre la superficie del ladrillo. Realmente, las eflorescencias  peligrosas son las que aparecen en el interior del material, ya que por combinación de agua y hielo se puede llegar a partir el material. Las eflorescencias superficiales, se pueden  eliminar mediante el lavado con agua o productos específicos, aplicados cepillando la superficie.

Condensación: las humedades por condensación aparecen por el vapor de agua contenido en el ambiente, el mayor problema que ocasiona la condensación es la proliferación de hongos, manchas y olores. Las condensaciones en el interior del muro pueden llegar a ser muy peligrosas, ya que no son perceptibles a simple vista.

Patologías del ladrillo debidas a las acciones mecánicas.

Acción que retracción y dilatación: la dilatación y la retracción se producen debido a los distintos coeficientes de dilatación del mortero y del  ladrillo, y  puede llegar a producir fisuras y grietas. Para evitar estos efectos se suele sumergir el ladrillo previamente en agua antes de su colocación, también  se colocan juntas de dilatación en paños de fábrica cada 30 metros aproximadamente.

Corrosión: cuando en  una fábrica de ladrillo  colocamos armaduras en los tendeles de refuerzo y no los recubrimos correctamente con el mortero de cemento, en  contacto con el agua se origina oxidaciones,  apareciendo manchas de oxido y fisuras horizontales, esto se previene mediante recubrimientos suficientes de mortero que garanticen la impermeabilidad.

®redactado por equipo editorial de construcción.vilssa