Me gustan las casas pequeñas

Me gustan las casas pequeñas. Una cabaña para 8 personas. Charlotte Perriand (1903-1999) fue una arquitecta y diseñadora amante de la montaña donde encontraba parte de su inspiración.

Esta Arquitecta diseñó varios refugios en la década de 1930, uno de ellos es el llamado Tonneau, que  se convirtió en un icono que posteriormente serviría  de inspiración para otros proyectos, como por ejemplo la estación invernal de la Concordia en la Antártida.

Buscar la vivienda mínima se ha convertido en un gran reto en los últimos tiempos

La firma Cassina, siguiendo los bocetos originales de este refugio, lo ha reproducido y expuesto en el salón del mueble de Milán.

Esta cabaña es una mini vivienda, dotada de los servicios mínimos necesarios para poder dar servicio como refugio, no en  vano su inspiración inicial fue la de cabaña de montaña. 

La cabaña se configura a partir de un pilar central y está constituida por elementos prefabricados: paneles de aluminio de gran ligereza y fáciles de montar.

Aunque inicialmente está concebida como refugio de montaña para ser ocupado durante periodos cortos, podría convertirse en un ejemplo de vivienda mínima,  ya que sus poco más de 14 m² albergan todo lo necesario para poder considerarla una vivienda.

La estructura tiene unas dimensiones de 380 cm de diámetro y 392 cm de altura, en este pequeño espacio se recurre a  ingeniosas soluciones, por ejemplo la calefacción se encuentra dentro del pilar central de acero y ocupa lo mínimo posible, las camas de la planta baja se pliegan y se pueden convertir en asientos, y en la cocina se aprovecha el agua de la nieve derretida.

Cada pieza  está cuidadosamente diseñda y es pura funcionalidad.