Las galerías acristaladas en nuestros edificios

Las galerías acristaladas en nuestros edificios.  Cuando paseas por algunas ciudades de climas fríos, posiblemente te encuentres con edificios cuyas fachadas presentan unos salientes acristalados que llegan incluso a ocupar toda la superficie de fachada.

¿Qué son estas galerías acristaladas, para que sirven y por qué se encuentran sólo en determinadas zonas?

Qué son las galerias acristaladas, para qué sirven las galerias acristaladas

Hoy en día, gracias al avance de la tecnología de los materiales, nuestros edificios incorporan sistemas constructivos que consiguen aislarnos del frio en invierno y protegernos del calor en verano. Esto ha convertido nuestras viviendas en lugares más acogedores que los hogares de nuestros abuelos, aunque a veces se caiga en un derroche absurdo de medios para lograr resultados que antes conseguían con sentido común, conocimiento del entorno y un poco de imaginación.

Y un ejemplo de arquitectura inteligente y perfectamente adaptada al entorno son las galerías acristaladas. Estudiémoslas con un poco de detalle.

Por qué las galerías acristaladas sobresalen de las fachadas. La razón por la que estos espacios vuelan unos centímetros es porque persiguen captar la mayor cantidad de luz posible y evitar las sombras. Si estas galerías estuvieran en el mismo plano que la fachada, el propio cerramiento arrojaría sombra en el interior, impidiendo captar más calor.

Por qué las galerías son acristaladas. Las galerías se acristalan con la intención de lograr el efecto invernadero, es decir: el cristal es un material con una alta conductividad térmica, es muy mal aislante y por lo tanto trasmite muy bien el calor, sin embargo, nos protege del viento y de la lluvia. El calor que atraviesa el cristal calienta el aire que hay entre este y el cerramiento interior opaco, creando un espacio con una temperatura superior al exterior, a su vez, gracias al efecto invernadero, conseguimos calentar la fachada opaca interior, que por inercia nos transmitirá el calor ganado durante las horas diurnas cuando el sol ya no caliente.

Por qué la mayoría de las galerías acristaladas suelen ser blancas. En realidad, no todas las galerías de los edificios son de color blanco. De hecho, en muchos lugares estas galerías son de tonos oscuros. El color es una elección que depende de otros factores más cercanos a la tradición del lugar que a un sentido funcional. Es posible que, en lugares de climas fríos y de cielos grises, algunos constructores locales optaran por utilizar el blanco, ya que es un color que aporta luminosidad. Con el tiempo esta costumbre se convirtió en norma y hoy en día hay muchos ayuntamientos que obligan a pintar las galerías de color blanco.

Las contraventanas. Las contraventanas son unos elementos que tradicionalmente se empleaban en los edificios para evitar la entrada de luz. Su efecto es muy parecido al de las galerías acristaladas, aunque a escala mucho menor. La manera de utilizar las contraventanas dependerá del objetivo que se persiga: ganar calor y evitar la entrada de luz o sólo evitar la entrada de luz. Posiblemente imagines a que nos referimos….conseguiremos un efecto u otro dependiendo de dónde coloquemos la contraventana, antes o después del vidrio, pero de esto hablaremos en otra ocasión.

En conclusión, la arquitectura popular, como puedes imaginar, es el resultado de  muchos años de experiencia y tradición. Es una pena que hoy en día muchos la consideren algo antiguo y con poco glamour, y lo que es más lamentable es que no se sepa aprovechar un conocimiento forjado a lo largo de muchos siglos y adaptarlo a nuestros días. No hace falta colocar contraventanas de madera en nuestros edificios, pero tampoco tiene sentido hacer un rascacielos de cristal en Abu Dhabi.

®redactado por equipo editorial de construccion.vilssa