Entra frío por las ventanas, cómo evitarlo.

Entra frío por las ventanas, cómo evitarlo. A más de uno le habrá pasado en alguna ocasión que al acercarse a una ventana siente más frío, dándole la sensación que entra aire por alguna junta o simplemente que está más frío al lado de la ventana que al lado de la pared, algo que en invierno puede suponer grandes perdidas de calor y por lo tanto un incremento en la factura de calefacción.

El frío que entra por la ventanas o mejor dicho, el calor que se escapa por ellas es la principal razón por la que una casa de mala calidad tiene una eficiencia energética muy baja. 

No todas las casas se construyen de la misma forma, y lamentablemente, hasta hace pocos años, la mayoría de nuestros edificios eran bastante deficientes desde el punto de vista del aislamiento térmico, mucho más que las casa antiguas, que en su día se construyeron de forma más inteligente.

Cómo evitar que entre el frio a través de las ventanas

Afortunadamente, los tiempos han cambiado y hoy se construye con mejores materiales y teniendo en cuenta aspectos como el aislamiento al frío o al ruido. Aún nos queda mucho por hacer, por ejemplo, comenzar a construir teniendo en cuenta las orientaciones, los nuevos sistemas de instalaciones, etc…, pero lo cierto es que no tienen nada que ver los edificios construidos en la última década con los que se construían hace 50 años.

Pero claro, si no tienes la suerte de vivir en un edificio de nueva construcción, ¿cómo puedes mejorar la calidad de tu casa sin invertir en una reforma integral y gastarte un montón de dinero?

Entra frío por las ventanas, cómo evitarlo. Sin entrar a valorar como podríamos mejorar el aislamiento global de nuestra casa cambiando fachadas y revestimientos, veamos de qué manera podemos evitar perder calor por las ventanas.

1-Generalmente hay dos tipos de ventanas: las ventanas abatibles y las ventanas correderas. Ambas tienen ventajas y desventajas. Las ventanas correderas son muy útiles porque ocupan muy poco espacio cuando las abres, de hecho se abren en el mismo plano de la ventana, por lo que puedes colocar en frente de esta cualquier mueble sin preocuparte de que al abrir la ventana esta choque con él. Sin embargo las ventanas correderas tienen un problema, y es que es casi imposible sellar las juntas de manera casi hermética, ya que los rieles por los que se desliza una ventana corredera tienen que tener un pequeño margen para poder deslizar, y este pequeño espacio entre la guía de la ventana y el riel es por donde se escapa el calor de nuestra casa o entra el frío de la calle.

Así pues, la primera medida que podemos adoptar para evitar que el frío entre por las ventanas es sustituirlas, en caso de que las nuestras sean ventanas correderas, por ventanas abatibles.

2-El vidrio. ¿te suena el climalit? El climalit es una marca que se confunde comúnmente con el doble vidrio. El vidrio es un material con una conductividad térmica muy alta, es decir, deja pasar el calor muy fácilmente a través de él. Esto está muy bien cuando da el sol en invierno, pero no es tan bueno cuando hace frío y el sol no incide directamente sobre la ventana.

Necesitamos asegurar que los vidrios de nuestras ventanas no dejan pasar el calor ni el frío. ¿Cómo lo hacemos? Teóricamente podríamos hacer un vidrio de 24cm de espesor, pero en la práctica es imposible, así que lo que hacemos es combinar una lámina de vidrio con una cámara de aire. De esta forma aumentamos la resistencia térmica de nuestra ventana.

Por lo tanto, si entra frío por la ventana, una de las cosas que vamos a cambiar es el tipo de vidrio. ¿Y cuál pongo? eso depende del lugar donde vivas. En el norte de Europa ponen incluso ventanas con tres vidrios, pero en climas más templados no es necesario. Lo común es combinar como mínimo 4+12+4 (4 de espesor de vidrio + 12 cámara de aire + 4 de espesor de vidrio), aunque es mejor un vidrio 6+12+6 o uno más grueso 8+10+8.

3-La doble ventana. No siempre podemos cambiar una ventana completa, de hecho lo más frecuente cuando tenemos ventanas correderas al interior del muro de la fachada (una solución muy típica de los edificios construido en los años 60 del siglo XX), es colocar una segunda ventana a cara exterior. ¿Qué ganamos con esta solución? Al colocar una ventana al exterior de la fachada conseguimos crear una cámara de aire entre ambas y aumentar la resistencia térmica del cerramiento. Aunque no funciona con la misma eficacia que una buena ventana con cristal doble, desde el punto de vista global es muy rentable, ya que a menor inversión obtenemos unos buenos rendimientos. Además, el colocar doble ventana tiene una ventaja añadida: aumentamos el aislamiento acústico.

4-Y que sucede con los marcos y las posibles juntas por las que entra el aire. El material del marco es muy importante. De hecho, el calor que pasa a través de una ventana depende mucho del material con el que están hechos los marcos, nos es lo mismo utilizar aluminio que PVC. Teóricamente, el PVC o la madera son muchos más aislantes que cualquier metal, pero en la práctica se tiene que tener en cuenta otro tipo de factores como la sección de la ventana, la rotura de puentes térmicos, etcétera. Así pues, podemos afirmar que en principio son mejores las ventanas de PVC, sin embargo, hay marcos de aluminio con características mucho mejores respecto al aislamiento térmico que cualquier ventana hecha con PVC. Por lo tanto, a la hora de elegir un material para el marco de nuestra ventana es necesario estudiar las características técnicas de cada uno para poder elegir la que más se adapte a nuestras necesidades.

En conclusión, si estamos buscando evitar que el frío entre por nuestras ventanas tenemos que valorar distintas opciones dependiendo de muchas variables, eso sí, te aconsejamos que no dudes en invertir en cambiar tus ventanas o añadir una doble ventana porque de esta manera ahorrarás mucho  en gastos de calefacción, hoy en día, incluso existen empresas que te venden online una ventana para que la coloques tu mismo.