El pueblo de Cudillero en Asturias
El pueblo de Cudillero en Asturias. En nuestra ruta por la Asturias cantábrica, nos encontramos con Cudillero, un pueblo esculpido en la ladera de una colina y de aire claramente marinero.
A las gentes de Cudillero se las llama pixuetos y conservan su propia lengua de origen nórdico, no en vano algunos creen que los paisanos de Cudillero descienden de los antiguos navegantes vikingos. Lo cierto es que, Cudillero es un pueblo pesquero y hasta hace poco su economía se basaba únicamente en la pesca, hasta que recientemente el turismo se ha convertido en una importante fuente de ingresos en la zona.
El pueblo de Cudillero en Asturias. un pueblo pesquero y casi tallado en la ladera
Cudillero tiene, por así decirlo, dos partes diferenciadas, la primera en lo alto de la colina con casas palaciegas y afrancesadas, algunas producto de las riquezas de ultramar de los indianos. El otro Cudillero es el que mira al mar, con caserío de calles estrechas y en pendiente.
Para acceder a Cudillero es necesario descender por la laberíntica carretera de la ladera, una vez superado el alto del Pito descendemos hasta el pueblo, pasando por el palacio de los Selgas y sus jardines con estatuas, estanques, fuentes y ornamentos del siglo XIX. En esta residencia, en un museo privado al que sólo se acede con permiso de sus propietarios, podemos encontrar cuadros de Goya y el Greco y una colección de tapices fabricados en Bruselas en el siglo XVI.
Próxima al palacio de los Selgas, encontramos un iglesia neorománica de Santines de Pravia, que fue fundada por el rey Silo en el siglo VIII y que posee un altar románico que es el más antiguo de España.
Hay otra iglesia que llama también la atención, se trata de la iglesia de San Martín del Luiña, construida en el siglo XVII y que posee tres retablos barrocos sin imágenes, como anécdota podemos encontrar dentro de la iglesia, en el suelo de piedra de la nave central, una inscripción que dice: “no pasen de aquí a oír misa los vaqueros”.
Porque los vaqueros de alzada, autóctonos de las laderas de algún monte de la zona, dedicados al pastoreo y la trashumancia, fueron asturianos de segunda clase hasta hace poco, un pueblo con tradiciones curiosas, como las danzas en las que usan una llave para tocar el mango de una sartén.
Hoy en día, se exaltan las fiestas de los vaqueros, y todos se unen a beber y comer en las romerías, como la de Santa Ana de Montarés o la fiesta pagana de San Pedro, una fiesta prohibida durante la dictadura franquista y que poco a poco fue recuperando su fama y su espíritu burlón original, una fiesta en la que se dice de todo en lengua pixueta: “quermos l’Amuravela, que es cosa de antigüedá, y si el cura no la quier, que se vaya a sou llugar”, lo que parece que a las autoridades de la época no les gustaba mucho.
@redactado por equipo editorial de arquitectura.vilssa
El pueblo de Cudillero en Asturias
El pueblo de Cudillero en Asturias. un pueblo pesquero y casi tallado en la ladera