El forjado de chapa colaborante

Forjados de chapa colaborante. El forjado de chapa colaborante se compone de una chapa sobre la que se vierte hormigón, configurando de esta manera un elemento compuesto que resiste tanto las compresiones como las tracciones a flexión.

El forjado de chapa colaborante se comenzó a utilizar en Estados Unidos a mediados del siglo XX, se suelen utilizar placas nervadas, grecadas u onduladas que sirven como encofrado fijo y perdido para soportar el hormigón vertido. Estas placas nos ayudan a soportar la armadura a momentos positivos, o armadura a tracción del forjado acabado. Es por esto que a este tipo de forjados se les denomina colaborante, ya que hacen trabajar conjuntamente al hormigón y a la chapa nervada de soporte.

El forjado de chapa colaborante. Qué es y cómo funciona, aplicaciones, ventajas y desventajas

Este forjado necesita sostenerse sobre correas o vigas o bien sobre muros de carga. Los cantos de la losa terminada oscilarán entre los 100 a 150 mm en la mayoría de las ocasiones, pudiendo llegar a mayores espesores en casos especiales. El espesor de la chapa colaborante oscilará entre 1,2 y 2mm. Y la capa de compresión, es decir el espesor del hormigón que se vierte en el forjado de chapa colaborante, suele ser de 3 a 5 cm.

Aplicaciones del forjado de chapa colaborante. Los forjados de chapa colaborante presentan una serie de ventajas derivadas sobre todo de la rapidez de ejecución, lo que los hace ideales para determinados edificios tales como construcciones moduladas de escuelas, edificios de oficinas, o cualquier edificio de construcción repetitiva. También pueden usarse los forjados de chapa colaborante en obra civil de pasos peatonales, pequeños puentes, cubriciones de depósitos o canales. El forjado de chapa colaborante se utiliza bastante en todo tipo de edificación industrial, tanto para forjados como para cubiertas.

Puesta en obra del forjado de chapa colaborante. La ejecución de este tipo de forjados ofrece grandes ventajas frente a la construcción tradicional, para realizar un forjado de chapa colaborante será necesario realizar previamente el sistema de pórticos sobre el que se apoye la chapa. Una vez realizados los pórticos, que generalmente suelen ser de perfiles de acero, se procede a apoyar la chapa,  que actuará como encofrado perdido, lo que supone un ahorro de costes y de tiempo en la ejecución.

Ventajas y desventajas del forjado de chapa colaborante.

Ventajas del forjado de chapa colaborante.

• Rapidez en la ejecución
• Permite grandes luces y cargas con una reducida sección
• Los pesos del forjado son relativamente reducidos.
• La chapa colaborante actúa de encofrado perdido.

Desventajas del forjado de chapa colaborante.

• Se trata de un forjado con un coste elevado.
• El forjado de chapa colaborante tiene un mal comportamiento térmico y acústico.
• Necesita protegerse ante el fuego.
• Tiene peligro de oxidación, por lo que es necesario protegerlo con pinturas.

Fuente fotos: http://www.clgeng.com

®redactado por equipo editorial de construccion.vilssa