Diferencias entre una puerta blindada y una puerta acorazada

Diferencias entre una puerta blindada y una puerta acorazada. Uno de los aspectos más importantes a tener en cuenta a la hora de plantear la seguridad de nuestras viviendas son las puertas de entrada, ya que suponen el punto por el que los ladrones intentarán entrar o salir, sobre todo en viviendas en altura.

A diferencia de las ventanas, las puertas suelen tener dimensiones suficientemente grandes como para poder sacar cualquier objeto de la casa, y es por ello que los ladrones siempre intentarán entrar por la puerta principal.

Las puertas de entrada. Elegir entre una puerta blindada y una puerta acorazada

Pero hablando de puertas, que puerta son las más seguras, las puertas blindadas o las puertas acorazadas.

Diferencias entre una puerta blindada y una puerta acorazada

Las puertas blindadas. Vamos a comenzar definiendo las puertas blindadas. Las primeras puertas de seguridad que se vendieron el mercado eran las puertas blindadas, las puertas blindadas tienen un alma interna de chapa de acero que no supera nunca los 1,5 mm de espesor. La chapa de acero protegería ante algún impacto o punzonamiento, pero el gran problema de una puerta blindada es su anclaje al muro. El anclaje al muro de una puerta blindada se realiza a partir de marcos que suelen ser de madera y que están anclados directamente al ladrillo o al material del que este hecho  el muro.

El gran problema es que estos marcos es que ceden fácilmente ante una fuerza no muy grande, por ejemplo con palancas que podrían desmontar el marco de la puerta con muy poco presión. 

Así pues, aunque la puerta blindada tenga distintos puntos de cerradura, en algunas ocasiones se puede hablar incluso de cinco puntos de cierre, en realidad no suponen una gran garantía de seguridad ante ladrones experimentados. En cuanto a las cerraduras, aunque dispongamos de cerradura de gran calidad, una vez se desmonta el marco de la puerta, cualquier ladrón puede fácilmente desmontar el bombín.

Las puertas acorazadas.  Un paso más allá en la seguridad en las puertas de nuestra vivienda son las puertas acorazadas, las puertas acorazadas están formadas también por chapa de acero de distintos espesores, pero a diferencia de las puertas blindadas, en este caso se utilizan marcos de acero y estructuras más resistentes.

Una de las grandes ventajas de las puertas acorazadas es que forman un monobloque con el marco, y por lo tanto, para desmontar una puerta acorazada tendríamos que ocasionar un daño bastante considerable en toda la pared, lo que sin duda alejaría rápidamente a cualquier ladrón.

En conclusión, las puertas acorazadas son mucho más seguras que las puertas blindadas. En todo caso la seguridad de una vivienda no puede concentrarse únicamente en una puerta muy segura, sobre todo cuando vivimos en viviendas unifamiliares o alejadas del núcleo urbano, donde existen muchos puntos diferentes de acceso, ventanas balconeras, puertas de entrada la casa, puertas de garaje, etcétera.

Aparte de las medidas de seguridad básicas de cualquier vivienda: puertas acorazadas, ventanas con buenas cerraduras y contraventanas de acero que puedan cerrar se cuando se necesite, etcétera. lo más aconsejable es disponer de unos buenos dispositivos de alarma conectados con alguna central de manera que puedan disuadir fácilmente a los posibles ladrones. Y por supuesto, en este tipo de viviendas, lo mejor es siempre disponer de un buen seguro que nos garantice la reposición de los bienes perdidos en caso de robo.