Descubrir una ciudad caminando
Descubrir una ciudad caminando. Este artículo surge de una lectura que realicé hace unos años y que me impresionó gratamente, se trataba del libro de Francesco Careri, El andar como práctica estética. Gracias a la lectura de este libro, un grupo de amigos decidimos vivir una experiencia realmente interesante y que consistió en intentar salir caminando de una gran ciudad como Madrid, algo que resultó tremendamente difícil, todo hay que decirlo, y cuya aventura quizás contemos en otra ocasión.
Descubrir una ciudad caminando. No queremos aburrirte con un discurso extenso sobre las ventajas del caminar, queremos en este articulo convencerte para que, si tienes la oportunidad, recorras caminando tu ciudad, tranquilamente y sin rumbo fijo.
Una experiencia muy interesante: descubre tu ciudad caminando
La lectura del libro de Francesco Careri, el andar como práctica estética, te aporta una visión muy interesante sobre experiencias desarrolladas por artistas e intelectuales en las últimas décadas, desde el arte de Richard Long y sus intervenciones sutiles en el paisaje, hasta las excursiones de los situacionistas y las teorías de la deriva o el errabundeo por la ciudad.
Podriamos pensar que las ideas de aquellos locos artistas franceses que salían a recorrer caminando la ciudad de Paris son demasiado extravagantes, pero la verdad es que no se diferencian mucho de las actuales guías de las ciudades. Muchos pueden pensar que la visión de la ciudad de personas como Guy Debord es demasiado snob, y si le explicas a un amigo que te viene a visitar a tu ciudad que has pensado que lo mejor es errabundear por la ciudad, quizás piense que no estas bien de la cabeza y hasta es posible que no le haga mucha gracia, porque para muchas personas salirse de lo normalmente aceptado no es fácil, y en este caso lo que marca la costumbre es recorrer tu ciudad visitando los lugares más famosos y que por supuesto aparezcan en las guías turísticas.
En fin, no se trata de molestar a tus invitados, por lo que quizás lo que te proponemos es mejor que lo hagas sólo o acompañado de algún amigo al que le hayas contado tus intenciones previamente.
Descubrir una ciudad caminando, se trata de algo tan sencillo que quizás resulte a simple vista absurdo, se trata de salir a caminar por tu ciudad sin rumbo. Seguro que ya lo has hecho alguna vez, pero lo que te proponemos es que en esta ocasión lo hagas descubriendo lugares que aunque habías visto miles de veces, quizás no te habían llamado la atención. No se trata de llegar andando a la Torre eiffel o visitar los grandes monumentos de tu ciudad, se trata de descubrir un portal en un edificio normal, una fachada con ropa tendida en las terrazas, una acera más sucia de lo habitual, gentes distintas en cada barrio, etc...
Se trata también de preguntarte cosas tan curiosas como el origen y la historia de las calles. Por ejemplo, descubre los antiguos caminos que salían de la ciudad y que ahora están diluidos en una gran avenida, pregúntate porque tenían esa dirección, observa los edificios que los flanquean, busca restos de puertas o murallas, averigua de donde le viene el nombre a la calle, etc... Te puedo asegurar que te llevarás gratas sorpresas.
Caminar es una experiencia realmente enriquecedora, porque caminando descubres una nueva escala, la del peatón, la escala humana. Valoras el tiempo de otra forma, observas las cosas de otra manera, de hecho, quizás sea la mejor forma de conocer tu entorno, ya que el ser humano no esta capacitado para obtener detalles de su alrededor cuando circula a 120km/. No somos halcones.
En definitiva, te aconsejamos que hagas dos cosas, leer el libro de Francesco Careri, “el andar como práctica estética”, y descubrir tu ciudad caminando pacientemente. Seguro que ninguna de las dos experiencias te decepciona.
Descubrir una ciudad caminando
Una experiencia muy interesante: descubre tu ciudad caminando