Cómo arreglar los desperfectos del suelo de mi casa
Cómo arreglar los desperfectos del suelo de mi casa. El mantenimiento de ciertas partes de nuestra casa suele ser, a veces, bastante complicado, sobretodo cuando se trata de elementos como los suelos o los alicatados.
Un pequeño desperfecto puede arruinar toda la imagen de un suelo, y a veces, parece que la única solución es cambiarlo entero, sobretodo si no somos muy hábiles con el bricolaje doméstico.
No todos los suelos son iguales y hay algunos cuyas reparaciones son más difíciles, o incluso imposibles, bien sea porque ya no existen piezas para repararlo (algunos suelos de gres) o bien porque no sea sencillo sustituir una pieza (por ejemplo un suelo de terrazo in situ)
Pequeñas reparaciones en los suelos de nuestra casa: moquetas, linóleo, baldosas
Reparaciones superficiales de distintos suelos
Reparación de suelos de baldosas de gres. Aunque parezca que son las más difíciles de arreglar, en mi humilde opinión es todo lo contrario, siempre y cuando contemos con piezas de repuesto.
-Reparación de juntas. Las juntas entre baldosas del suelo suelen ensuciarse o incluso desprenderse con el paso del tiempo. Para reparar una junta basta con comprar productos de sellado en una tienda de bricolaje y aplicarlos con cuidado sobre toda la junta, repasando con el dedo o con un trapo húmedo.
-Reparación de suelos de baldosas rotos. Si contamos con una baldosa de repuesto lo único que tenemos que hacer es quitar previamente la pieza dañada. Para ello, con ayuda de un destornillador de punta plana, eliminaremos primeramente las juntas entre la baldosa que vamos a sustituir y las baldosas que la rodean. Con un martillo, daremos un golpe seco en la pieza hasta conseguir que se parta en distintos trozos. Luego, con mucho cuidado y con paciencia iremos quitando los trozos de baldosas. La unión al soporte puede estar hecha con cemento o con cola, pero en todo caso tendremos que quitarla con ayuda de un cincel y el martillo hasta conseguir tener espacio suficiente para aplicar nueva pasta de agarre.
Lo más conveniente es utilizar cemento cola para baldosas que puedes encontrar en los grandes almacenes. Hacer la mezcla es muy fácil, sólo necesitamos seguir las instrucciones de los envases mezclando agua y pasta en las proporciones que nos indiquen y aplicarlo en el soporte para colocar encima la baldosa. Pasadas 24 horas podremos aplicar el sellado de juntas y a las 72 horas ya se podrá pisar el suelo.
Reparación de suelos de linóleo. El linóleo es un material muy interesante para todo tipo de suelos y muy fácil de colocar y por lo tanto de reparar.
Si tienes que sustituir un trozo de linóleo bastará con cortarlo con un cúter, levantarlo y volverlo a pegar con ayuda de un adhesivo especial. A veces, cuando levantas el linóleo es posible que dañes el soporte y hagas un pequeños agujero que tienes que tapar para conseguir una superficie lisa. Para ello tendrás que utilizar cemento de nivelación, que es un cemento muy líquido y muy fácil de aplicar y que venden en cualquier tienda de bricolaje. Eso si, antes de volver a colocar el suelo de linóleo, tienes que dejar que la superficie seque totalmente.
El linóleo tiene un problema y es que al repararlo se verá una junta entre la pieza vieja y la nueva. En el caso de que el suelo tenga algún dibujo tienes que tener mucho cuidado de hacerlas coincidir, y en el resto de casos, te aconsejo que estudies muy bien donde realizar el corte para que el acabado sea lo más bonito posible y no quede una junta en medio del suelo.
Reparación se suelos de moqueta. A los suelos de moqueta le sucede algo parecido a los suelos de linóleo con respecto a las juntas. Cuando tenemos que reparar un suelo de moqueta, tenemos que actuar de la misma forma que con un suelo de linóleo, es decir, cortando un trozo y sustituyéndolo por otro procurando que no se aprecie el corte, aunque en el caso de suelos de moqueta, este queda más disimulado.
¿Cómo quitar las marcas dejadas por los muebles en una moqueta? Cuando movemos un mueble de un lugar a otro en un suelo de moqueta se ven las marcas dejadas por el apoyo de este. Existe una forma de quitar dichas marcas, siempre y cuando la huella no haya dañado el pelo de la moqueta.
Pasaremos un cepillo empapado en agua y amoniaco y lo dejaremos secar muy bien, cubriremos con un paño blanco y aplicaremos la plancha por encima, pero sin apoyarla completamente. Antes de pisar la moqueta, dejaremos que seque completamente.
fuente foto:tnarik
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