Casas en cuevas. Casas enterradas

Casas en cuevas. Viviendas en cuevas. Este tipo de viviendas ha sido tradicionalmente muy empleada por todo tipo de civilizaciones, comúnmente se denominaba a las casas cuevas casas trogloditas.

Las casas en cuevas tradicionalmente han sido escavadas en las laderas de la montaña o aprovechando alguna cueva existente, actualmente se diseñan casas basadas en esta tipología,  pero que en vez de estar excavadas en el terreno son posteriormente tapadas por una pequeña montaña artificial, el efecto es similar al original.

Casas en cuevas. Que son las casas en cuevas y las casas enterradas

El origen de las casas cueva es el intento de economizar la construcción de nuestros hogares y refugios, sin embargo, desde el punto de vista de la eficiencia energética este tipo de construcción es muy efectiva y supone un ahorro importante en la climatización de nuestros hogares, tanto en invierno como en verano.

Las casas cuevas se repiten a lo largo de toda la geografía, tenemos ejemplos de casas en Cuevas en Estados Unidos, Alaska, Canadá, el Mediterráneo, Etiopía o Asia. Las casas cuevas son un claro ejemplo de lo que hoy en día denominamos arquitectura bioclimática.

Comportamiento térmico de las casas en cuevas.

Una de las principales características diferenciadoras de las casas en cuevas es su comportamiento térmico. En este caso estamos hablando de que los muros no tiene un espesor de unos centímetros, sino de muchos metros, lo que les hace insensibles a los cambios térmicos exteriores.

La temperatura de la tierra permanece casi invariable durante todo el año, esto hace que las diferencias térmicas dentro de las casas cueva sean muy poco apreciables. La sensación de bienestar es mayor en verano que en invierno, ya que en verano la temperatura exterior está más cerca del punto de confort que en invierno, de hecho en invierno la temperatura en las casas cueva puede resultar excesivamente bajo, aunque esto se soluciona con una simple estufa o con el propio calor que desprende la cocina, ya que gracias a la gran inercia térmica de las casas cueva, una vez alcanzada cierta temperatura esta se mantendrá durante mucho tiempo.

Pero no todo son ventajas en las casas cueva. El principal inconveniente viene de la dificultad que existe para ventilar este tipo de viviendas. La configuración de los muros en contacto con el terreno a diferentes temperaturas hace que proliferen las condensaciones y humedades y por consiguiente las patologías derivadas de las mismas. Esto se soluciona mediante una correcta ventilación. Lo más usual es utilizar chimeneas o patios interiores.

Otro de los aspectos importantes a resolver en las casas cueva es el tema de la iluminación, que  al igual que la ventilación se puede resolver mediante aberturas en cubierta y patios interiores

®redactado por equipo editorial de arquitectura vilssa.