Camino de Santiago. Santo domingo de la Calzada

Camino de Santiago. Santo domingo de la calzada. En nuestro viaje por el camino de Santiago nos encontramos con  Santo Domingo de la Calzada, cuyo trazado ha sido recientemente restaurado  a su paso por la ciudad poniendo en valor el antiguo camino de peregrinos.

Santo Domingo de la Calzada es una ciudad con una historia curiosa. Hacia mediados del siglo XI, Domingo García, un eremita, se instala  en el bosque de Ayuela cerca del río Oja, durante los siguientes años procede a acondicionar el camino entre Nájera y Redecilla del Camino, levanta una ermita, un hospital y un albergue para peregrinos del camino de Santiago y comienza la construcción de un puente sobre el río Oja.

Camino de Santiago a su paso por Santo domingo de la Calzada. Historia de la ciudad

Poco a poco van surgiendo pequeñas casas alineadas sobre el camino, lo que constituye el germen de la ciudad de Santo Domingo de la Calzada, primitivo barrio viejo.

El rey castellano Alfonso VII delimita posteriormente el término y la jurisdicción del primitivo burgo de Santo Domingo, promoviendo la parcelación de un barrio nuevo. Durante estos años, el asentamiento adquiere un perfil urbano característico de las ciudades camino, es decir, estructurada a partir del propio camino que se configura como calle mayor del núcleo urbano.

Hacia mediados del siglo XIV Pedro I el cruel conquista y amuralla la ciudad, dejando un gran espacio entre el casco urbano y los límites de la muralla para terrenos de cultivo.

Hasta mediados del siglo XIX, el crecimiento de la ciudad se va a realizar densificando y ocupando este espacio que queda entre el  recinto y los arrabales.

Santo Domingo de la Calzada es una ciudad dedicada especialmente a la artesanía, en ella surgen arquitecturas monumentales ligadas al clero y la nobleza. La iglesia adquiere la categoría de catedral en el año 1235. En el siglo XV se construirá la ermita de Nuestra Señora de la plaza y en el siglo XVI se levanta el convento de San Francisco.

En el siglo XVIII se construyen el ayuntamiento y otros edificios públicos en la plaza de España, la fábrica de paños de Pérez Iñigo y la famosa torre exenta de la catedral.

El crecimiento de la ciudad se traslada extramuros tras el derribo parcial de  la muralla en el siglo XIX, rompiendo de alguna forma con la trama tradicional urbana mantenida hasta el momento.

A partir de 1860 la ciudad comienza a crecer extramuros y se va extendiendo hacia la nueva carretera de Burgos-Logroño.

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®Redactado por equipo editorial de arquitectura.vilssa