Algunos mitos falsos sobre cómo ahorrar energía. Consejos para ahorrar energía en casa

Algunos mitos falsos sobre cómo ahorrar energía. Consejos para ahorrar energía en casa.

Este artículo nace de una conversación que tuvimos el otro día con una persona que nos aseguraba que su sistema de calefacción era el más barato ya que había contratado el “calor azul” y que gracias a él conseguía ahorrar mucho en calefacción. 

En realidad, nuestro interlocutor no ahorraba en calefacción por contratar el calor azul, en todo caso ahorraría si la tarifa eléctrica que tuviese contratada fuese muy baja, lo que no pudimos comprobar. Porque el calor azul es un tipo de tarifa de la compañia eléctrica, no un tipo de energía.

Hay muchos artículos en internet que nos dan consejos para ahorrar energía, pero nosotros, lo que vamos a hacer es contarte aquellos consejos que circulan de boca y en boca y que no suponen ningún ahorro para nuestro bolsillo.

Mitos falsos sobre cómo ahorrar energía en nuestra casas

Algunos mitos falsos sobre cómo ahorrar energía. Este artículo nace de una conversación que tuvimos el otro día con una persona que nos aseguraba que su sistema de calefacción era el más barato ya que había contratado el “calor azul” y que gracias a él conseguía ahorrar mucho en calefacción.  En realidad, nuestro interlocutor no ahorraba en calefacción por contratar el calor azul, en todo caso ahorraría si la tarifa eléctrica que tuviese contratada fuese muy baja, lo que no pudimos comprobar. Existen muchos mitos falsos sobre cómo ahorrar energía y por lo tanto disminuir el coste de la factura de la electricidad o de gas, veamos algunos de ellos. 1-La calefacción apagada consume más que mantenerla a temperatura constante. Existe la creencia de  que es mejor mantener la calefacción encendida constantemente que apagarla y encenderla varias veces al día. En realidad, el consumo dependerá de la energía que necesitamos para alcanzar la temperatura que queramos. Así pues, si queremos tener una temperatura de 20° necesitaremos aportar energía suficiente para contrarrestar la temperatura inicial que tengamos en nuestra casa y nos da lo mismo hacerlo de manera puntual que de manera constante a lo largo del día. Así pues, la única forma de ahorrar energía sin calefacción, es conformarnos con temperaturas de confort más bajas, pero no ganamos nada encendiendo y apagando la calefacción o manteniéndola constantemente encendida. Eso sí, . De vista del bienestar dentro una vivienda, es más interesante mantener una temperatura constante que ir pasando de altas temperaturas a bajas lo largo del día, de hecho, inconscientemente, cuando tenemos mucho frío ponemos la calefacción a tope y esto puede resultar a la larga más caro, porque no controlamos el tiempo que manteneos la calefacción a toda potencia. 2-Los aparatos en stand Bay no consumen. Está comprobado que todos los aparatos consumen una pequeña cantidad de energía aun estando en posición de stand by. De hecho, en posición de reposo muchos aparatos electrodomésticos necesitan algo de energía para mantener en funcionamiento los sistemas internos, tales como relojes, termostatos, pequeños ordenadores, etc...., se estima que el consumo de los aparatos electrodomésticos en stand by puede acercarse al 5% del consumo total a lo largo del año. 3-Las cocinas eléctricas gastan menos energía que las cocinas de gas. Hay muchas personas que piensan que las cocinas eléctricas gastan menos energía que una cocina de gas, cuando hablamos de cocinas eléctricas no referimos tantas a las cocinas vitrocerámicas como a las cocinas por inducción, en ambos casos, las cocinas que producen calor partir  de electricidad son mucho más caras que las cocinas de gas, ya que el kwh de gas es mucho más barato que el kwh de electricidad. 4-Limpiar los platos a mano es más barato que hacerlo con el lavavajillas. Hay personas que consideran que fregar la vajilla a mano consume menos agua que hacerlo con el lavavajillas. En realidad esto no es así, porque tu lavavajillas trabaja de manera mucho más eficiente que nosotros cuando fregamos los platos a mano. El ahorro en agua puede llegar a superar los 100 l de lavado para una misma cantidad de vajilla, además, los platos suelen salir mucho más limpios lavándolos con el lavavajillas que haciéndolo a mano. Esto mismo se podría trasladar a otras actividades domésticas como lavar la ropa a mano. Existen otras creencias populares, cada vez menos extendidas, pero que hace años circulaban en boca de todos como maneras de ahorrar energía, por ejemplo mantener las luces encendidas consume menos que encenderlas y apagarlas cada vez. Creencia que también se extendía al encendido y apagado del motor de los vehículos. Es cierto que muchas veces cuando los aparatos entran en funcionamiento demandan un pico de energía, por ejemplo las instalaciones de aire acondicionado, los motores de combustión, etcétera. Pero en realidad, esta demanda de energía no es tan alta como para pensar que nos interesa mantener una instalación en constante funcionamiento aunque no la estemos utilizando.
Los aparatos en stand by también consumen energía, aunque sea muy poca.

 

Existen muchos mitos falsos sobre cómo ahorrar energía y por lo tanto disminuir el coste de la factura de la electricidad o de gas, veamos algunos de ellos.

1-La calefacción apagada consume más que mantenerla a temperatura constante.

Existe la creencia de  que es mejor mantener la calefacción encendida constantemente que apagarla y encenderla varias veces al día. En realidad, el consumo dependerá de la energía que necesitamos para alcanzar la temperatura que queramos. Así pues, si queremos tener una temperatura de 20°C necesitaremos aportar energía suficiente para contrarrestar la temperatura inicial que tengamos en nuestra casa y nos da lo mismo hacerlo de manera puntual que de manera constante a lo largo del día. Así pues, la única forma de ahorrar energía sin calefacción, es conformarnos con temperaturas de confort más bajas, pero no ganamos nada encendiendo y apagando la calefacción o manteniéndola constantemente encendida.

Eso sí, desde el punto de vista del bienestar dentro una vivienda, es más interesante mantener una temperatura constante que ir pasando de altas temperaturas a bajas a lo largo del día, de hecho, inconscientemente, cuando tenemos mucho frío ponemos la calefacción a tope y esto puede resultar a la larga más caro, porque no controlamos el tiempo que manteneos la calefacción a toda potencia.

2-Los aparatos en stand by no consumen. 

Está comprobado que todos los aparatos consumen una pequeña cantidad de energía aún estando en posición de stand by. De hecho, en posición de reposo muchos aparatos electrodomésticos necesitan algo de energía para mantener en funcionamiento los sistemas internos, tales como relojes, termostatos, pequeños ordenadores, etc...., se estima que el consumo de los aparatos electrodomésticos en stand by puede acercarse al 5% del consumo total a lo largo del año.

3-Las cocinas eléctricas gastan menos energía que las cocinas de gas.

Hay muchas personas que piensan que las cocinas eléctricas gastan menos energía que una cocina de gas, cuando hablamos de cocinas eléctricas no referimos tanto a las cocinas vitrocerámicas como a las cocinas por inducción, en ambos casos, las cocinas que producen calor a partir  de electricidad son mucho más caras que las cocinas de gas, ya que el kwh de gas es mucho más barato que el kwh de electricidad.

4-Limpiar los platos a mano es más barato que hacerlo con el lavavajillas.

Hay personas que consideran que fregar la vajilla a mano consume menos agua que hacerlo con el lavavajillas. En realidad esto no es así, porque tu lavavajillas trabaja de manera mucho más eficiente que nosotros cuando fregamos los platos a mano. El ahorro en agua puede llegar a superar los 100 l de lavado para una misma cantidad de vajilla, además, los platos suelen salir mucho más limpios lavándolos con el lavavajillas que haciéndolo a mano.

Esto mismo se podría trasladar a otras actividades domésticas como lavar la ropa a mano.

5-Mantener las luces apagadas consume menos electricidad. 

Bueno, lo de mantener las luces apagadas como medida para ahorrar si es cierto. Lo que sucede es que existe la creencia de que el ahorro es muy alto y en realidad el consumo de electricidad necesario para iluminar tu casa no es tan abultado como muchos piensan. Hoy en día, en tu casa hay dispositivos que consumen mucho más que una bombilla y los mantienen encendidos mucho tiempo, y si encima la bombilla es de tecnología LED, el ahorro por  "vivir a oscuras" es totalmente absurdo. Esta creencia tiene su origen en los años 50 del siglo XX, cuando en la mayoria de hogares los únicos aparatos que consumian electricidad eran las lámparas.

Las bombillas no gastan tanto como piensas
La iluminación en casa no consume tanto como piensas. Mantener las luces apagadas no es un ahorro en electricidad tan grande como piensas

6-Bajar una cuesta en punto muerto ahorra combustible. 

Este es otro de los mitos controvertidos sobre el ahorro de energía. Evidentemente si bajas una cuesta revolucionando un motor, consumiras más que si lo haces al ralentí, pero la diferencia se compensa con otros gastos como es el consumo de pastillas de  frenos. Hoy en día los vehículos tienen motores con inyección electrónica que regulan el consumo de combustible aunque el motor este al ralentí, así que no tiene ningún sentido poner en punto muerto tu coche a la hora de bajar una cuesta.

Existen otras creencias populares, cada vez menos extendidas, pero que hace años circulaban en boca de todos como maneras de ahorrar energía, por ejemplo, mantener las luces encendidas consume menos que encenderlas y apagarlas cada vez, creencia que también se extendía al encendido y apagado del motor de los vehículos. Es cierto que muchas veces cuando los aparatos entran en funcionamiento demandan un pico de energía, por ejemplo las instalaciones de aire acondicionado, los motores de combustión, etcétera. Pero en realidad, esta demanda de energía no es tan alta como para pensar que nos interesa mantener una instalación en constante funcionamiento aunque no la estemos utilizando.

 

Algunos mitos falsos sobre cómo ahorrar energía. Consejos para ahorrar energía en casa

Mitos falsos sobre cómo ahorrar energía en nuestra casas