¿Cómo aislar un tejado?

¿Cómo aislar un tejado?

En verano nadie se acuerda del frío del invierno y mucho menos se preocupa de aislar bien la casa, pero cuando bajan las temperaturas, todos hubiésemos deseado aislar mejor los cerramientos de nuestra vivienda. El problema es que hacer una obra en pleno invierno es mucho más molesto que hacerlo en verano y además, ya no podremos beneficiarnos de las ventajas de un buen aislamiento hasta el año siguiente.

¿Por qué aislar bien un tejado inclinado? Antiguamente los tejados de las casa estaban muy mal aislados. Tradicionalmente este papel lo desempeñaban cubrimientos como la teja o en el mejor de los casos una combinación de teja y madera. Con la llegada del hormigón armado, la madera, ese material tan buen aislante, desapareció, y los tejados muchas veces se limitaban a estar compuestos por un forjado de vigueta, bovedilla y una cubrición, a veces, ni tan siquiera se colocaba una impermeabilización. La teoría nos dice que en principio podría valer con colocar solo la teja, pero en la práctica, la realidad nos dice que lo mejor es aislar bien con un sistema multicapa.

En una casa unifamiliar, el calor se escapa por toda la envolvente y al no estar junto a otros espacios calefactados, es más difícil mantener la temperatura. En el caso  de casas con tejados inclinados, el problema aumenta porque tenemos más superficie de contacto con el exterior, lo que unido a la manía del calor de subir, hace de los tejados inclinados puntos débiles desde el punto de vista del aislamiento térmico de un edificio. En todo caso, las cubiertas inclinadas tienen otras muchas ventajas que compensan este aspecto.

Por qué aislar bien un tejado inclinado

Además, si vives en una casa aislada, te habrás dado cuenta de que la planta en contacto con el tejado se enfría mucho en invierno y se calienta mucho en verano, lo que quiere decir que tiene un mal aislamiento. Si, es cierto que un ático o buhardilla nunca va a mantener la temperatura de forma constante como sucede en un sótano enterrado, pero eso no significa que no podamos emplear materiales aislantes que contribuyan a un mejor aislamiento. Pero la pregunta llegados a este punto es ¿Cómo aislar un tejado inclinado?

Pues básicamente hay dos formas de hacerlo: por la cara exterior o por la cara interior.

Aislar por la cara interior: Si nuestra estructura de tejado es ligera, por ejemplo: entramado metálico o madera con paneles sándwich u otro tipo de cerramiento, nos puede interesar aislar por el interior con algún panel flexible como puede ser el aislamiento mineral (por ejemplo lana de roca). Con este sistema conseguiremos calentar la vivienda de forma rápida, pero también perderemos el calor rápidamente una vez apaguemos la calefacción.

Aislar por el exterior. Si tienes la suerte de tener una estructura de forjado muy densa, por ejemplo una losa de hormigón, estás de enhorabuena. En estos casos lo mejor es aislar por el exterior con un panel rígido como puede ser un panel rígido de alta densidad. Lo que conseguimos en este caso es que la propia inercia del forjado nos ayude a mantener la temperatura constante en el interior del edificio durante más tiempo. Es cierto que nos costará más tiempo calentar la casa, pero una vez caliente, mantendremos el calor durante mucho tiempo.

En cuanto al coste, si la casa está construida tendremos que pensar en la forma más económica de hacer la obra, pero si la casa se va a construir, no lo dudes, en climas fríos, lo mejor son estructuras con gran inercia térmica y un buen aislamiento en la cara exterior.

 

¿Cómo aislar un tejado?

Por qué aislar bien un tejado inclinado